Deportes Ovalle

La noche del pasado miércoles en que Deportes Ovalle llegó a la final de Copa Chile, a costas de Huachipato en la tanda de penales, tuvo un personaje que se ganó los aplausos del técnico del equipo, Cristián Muñoz, del plantel y de todos los ovallinos: el portero Carlos Lemus.

Este jugador, formado en las inferiores de Colo Colo y que jugó en el equipo de Deportivo Temuco que descendió a Tercera División junto a su técnico, Eduardo Bonvallet, tapó dos de los tres penales fallidos de los acereros en el duelo jugado anoche en el estadio Bicentenario de La Florida. 

Uno a José Luis Zelayes y otro a Dagoberto Currimilla les dieron a los del Limarí el pase a la final del torneo. Inmediatamente, la prensa y el equipo lo alzaron a la categoría de "héroe", pero él no se siente así. 

"No, no me siento 'héroe' porque uno nunca sabe si el día de mañana vaya a jugar mal. Así que ahora sólo tengo que aprovechar el momento y disfrutar de este triunfo", aseguró Lemus.

Esta tranquilidad en las declaraciones del portero ovallino, la matiza además con la ilusión que significa estar a 90 minutos de la gloria. "Me siento tranquilo y muy ilusionado por lo que hicimos, y ahora que llegamos a la final hay que ganarla. Siempre lo soñé, pero nunca creí que llegaríamos a esta instancia".

Respecto a la dicha que provocó en él y en sus compañeros la materialización de la clasificación a la final, Lemus aún no sale de su catatónica alegría.

"Es una felicidad que no se puede explicar con palabras. Creo que la alegía que nos dio ese triunfo es increíble, algo que con palabras no se puede describir", comentó el meta nortino.

El último paso de Ovalle será ante Universidad de Concepción, equipo de anoche eliminó a Unión Española, marcando así el final de la carerra de José Luis Sierra, pero para Lemus, llegar a esta final ya es como darse por pagado, pero aún así, cree que será un buen encuentro ante los del Campanil.